Por si alguien lo había olvidado, los 8 siglos de convivencia musulmana en España dejaron numerosas muestras de magnífico arte.
Oir hablar de mudéjar es pensar en Teruel.
Ya nuestros antepasados prehistóricos cazaron en la sierra de Albarracín y disfrutaron de excelentes abrigos naturales.
Viajeros en la actualidad hemos podido pasear por los pinares de Rodeno, patear las calles-cuesta-escalera de Albarracín, disfrutar de la gastronomía de la zona (aquí debió de nacer la gula) y relajarnos bajo el torico, salpicados por el agua de su fuente.
Y no te olvides de la obra literaria " Los amantes de Teruel". Unas fotos muy bonitas. No hay como estar jubiloso.
ResponderEliminarHay que adelgazar un chisquiño.
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